La barbería que "vaciaron" los delincuentes.

Un joven emprendedor de San Lorenzo se quedó sin nada. Menos el espejo y las sillas, le llevaron todas sus herramientas.

A principios del mes de marzo de 2020, después de mucho esfuerzo y de trabajar con otros barberos, Joaquín pudo montar su propio local al que denominó “TNT”, ubicado en la esquina de calle Misiones y Gutenberg de barrio José Hernández.

Nunca imaginó que semanas después comenzaría la cuarentena por la pandemia de coronavirus. Vinieron meses muy duros que hicieron peligrar su negocio, pero “la fue piloteando” y cuando se produjo la reapertura -con protocolos sanitarios- de los comercios de su rubro, volvió a trabajar, al menos, hasta el pasado miércoles 6 de enero.

Los delincuente forzaron la reja de una ventana e ingresaron a la barbería.

“Llegué a la barbería y me encontré con que habían arrancado la reja de la ventana, y se habían llevado todas mis herramientas. No me dejaron nada”, contó Joaquín en diálogo con SINTESIS.

Pero la inseguridad no solo le tocó a él. “Tres días después entraron de noche al almacén que está al lado de mi local y se llevaron mercadería”, aseguró.

El almacén lindero a la barbería también fue robado.

Aunque hizo la correspondiente denuncia policial y su barbería fue peritada, el joven emprendedor afirmó que los autores de los robos “son chicos del mismo barrio. Sabemos que andan repartiendo la mercadería de la vecina como si nada, pero la policía dice que necesita una orden de la Fiscalía para poder hacer algo”.

Las herramientas de peluquería y barbería que le sustrajeron tienen un costo aproximado de 300 mil pesos, una cifra inalcanzable para Joaquín.

“Necesito mis herramientas porque no puedo trabajar para darle de comer a mis dos hijos, no tengo el dinero para volver a comprarlas porque, encima se llevaron todo, ni me dejaron una tijera o una máquina para seguir cortando”, aseguró y lamentó: “todo el esfuerzo que le metí a la barbería fue en vano porque se llevaron todo y ahora me quedé sin nada”.

Las herramientas que le robaron a Joaquín y que ahora no puede volver a comprar.

“Tenemos un grupo de WhatsApp con otros colegas y ya están avisados por si alguien les ofrece mis herramientas o si se las quieren vender a algún chico que se quiera iniciar. Como nadie me puede ayudar las estoy buscando por todos lados, pero no hay caso, mi local sigue cerrado”, concluyó.